Fotograma de Liber Arce Liberarse. Handler, Jacob, Banchero (1969)

Otro 14 de agosto o cómo pensar un asesinato en celuloide

En este nuevo aniversario del asesinato de Líber Arce, al incorporar su biografía al sitio Historias Universitarias, proponemos pensar en la forma en que dos películas uruguayas narraron y resignificaron esa muerte casi un año después del acontecimiento de 1968. Ambos registros se encuentran hoy disponibles gracias a los procesos de recuperación y digitalización realizados en el Laboratorio de Preservación Audiovisual del AGU.

Refusila (GEC, 1969)

Refusila (1969), realizada por los estudiantes de Arquitectura del Grupo Experimental de Cine (GEC), ofrece una crónica del estallido social del 68 a través de una voz masculina y otra femenina que imitan la retórica y el estilo del periodismo radial. Este relato se alterna con pausas en silencio en las que el “tic tac” de un reloj, dramatiza y refuerza el clima de tensión. Al llegar al mes de agosto, mientras vemos imágenes de movilizaciones estudiantiles, las voces en over anuncian a modo de titulares: “250 mil personas despidieron a Líber Arce. Nuevos incidentes entre estudiantes y policía. Sacerdotes denuncian el estado de violencia en el continente. 22 de setiembre: otros dos estudiantes asesinados, varios heridos graves […] Advierte la policía al sindicato médico por violar las medidas de seguridad. […] 1 de octubre: siguen llegando aviones con armas/ Desocupación: subió el 60 por ciento […] 22 de enero: empleados de la administración central y entes del municipio chocaron con la policía. Es asesinado Arturo Recalde”.  De este modo, conectada a la coyuntura de violencia y pobreza del país, la muerte de Arce es puesta en relación con las otras muertes locales. A partir de este momento, irrumpe una música beat-jazz que acompaña una ágil edición de imágenes de enfrentamientos entre estudiantes y policías en acción; cuerpos suspendidos en el aire; brazos en alto arrojando piedras. Sorpresivamente, una melodía fúnebre marca un contraste emocional con lo que sigue: el rostro de un estudiante muerto, ataúdes. Refusila vuelve sobre los hechos para criticar el efecto homogeneizante de una retórica que expresó con igual tono la escasez de leche, la congelación de salarios y la muerte de los estudiantes. La vorágine del montaje se desacelera y marca, brevemente, una temporalidad diferente ante la muerte. No intenta provocar una respuesta sentimental o de congoja; es una pausa que pronto se disuelve con una melodía animada que retoma los combates callejeros. Pero poco a poco el montaje muestra una ciudad cada vez más vacía, oscura y militarizada. 

Fotograma de Refusila. Grupo Experimental de Cine (1969)

Refusila culmina con la imagen fija de una anciana en la calle; un final suspendido que transmite una atmósfera de incertidumbre, de confusión, opuesta a la claridad y la resolución del discurso militante de Líber Arce, liberarse (Handler, Jacob, Banchero, 1969). Realizada en el marco del Departamento de Cine de Marcha, con Mario Handler a la cabeza, esta película muda, sin sonido, ubica a la muerte de Arce en un contexto narrativo más amplio, que abre un mapa imaginario de cuerpos, cadáveres, que trasciende las fronteras nacionales. Imágenes de Vietnam se yuxtaponen con el sepelio de Arce; vemos un cuerpo ametrallado, otro incendiado, un helicóptero revolotea en el cielo, una muchedumbre aparece reunida frente a la Universidad, jóvenes colocan un cartel donde se lee “El compañero Líber Arce ha muerto, Pueblo: a la lucha”, un soldado americano posa para la cámara al lado de cuerpos destrozados que se muestran como trofeos. Mientras redoblan con su visceralidad la indignación, las imágenes de los muertos de otras geografías conectan a la muerte de Arce con lo global; a la lucha de Uruguay con las del Tercer Mundo, reforzando así el lugar del imperialismo norteamericano como el enemigo común. Y la película va incluso más allá; tematiza la política de la representación de los muertos y muestra cómo el cine puede ser un instrumento reconfigurador de sus lecturas. Nótese cómo la acción de la toma de la ciudad de Pando del MLN-T intercepta el crescendo dramático del final: una fotografía de Arce se yuxtapone con la imagen publicada en la prensa del tupamaro muerto y el montaje se acelera a un ritmo vertiginoso hasta culminar con una frase escrita con tiza: “Arce tu sangre no correrá en vano”. De este modo, la capacidad de reelaboración de sentido del montaje del cine queda en un primer plano: borra las fronteras de la política para reunir en una misma lucha a la agitación callejera con la acción guerrillera y a la militancia comunista, de Arce, con la tupamara. Este final ha sido leído en su llamado a la lucha armada como expresión del heroísmo militante a dar todo por la causa, reforzado además por la incorporación en los intertítulos, de la conocida frase del Che a la Tricontinental. Pero también podemos ver en él una forma en la que la película –el cine– dignifica y repone esa dimensión heroica de la que quedaron despojados los cuerpos insurgentes bajo el régimen visual oficial; una manera de transformar ese cadáver de la toma de Pando en una memoria política para potenciar la acción.

Liber Arce, liberarse (Handler, Jacob, Banchero, 1969)

Ambas películas tuvieron una importante circulación en la época y fueron reconocidas por crítica y público en Uruguay y en el exterior. Refusila participó en la Quinta Muestra de Cine Nuevo de Pesaro de 1969, junto con otros films uruguayos. Líber Arce, liberarse se exhibió en el 2do Festival de Cine Latinoamericano de Viña del Mar, Chile (1969); ganó el premio Joris Ivens en el Festival de Leipzig de 1969, participó en el Festival de Tours (1970), y obtuvo el premio de la crítica del Festival de Oberhausen (1971) que compartió con otras dos películas.

Hoy, gracias a la labor de recuperación del Lapa-AGU podemos volver sobre ellas para pensar el significado de la muerte de Líber Arce en aquel pasado y este presente.

Cecilia Lacruz

Sugerencias bibliográficas

Alvira, Pablo, “Lo viejo y lo nuevo. El documental uruguayo en tiempos turbulentos (1967-1971)”, en Georgina Torello (ed.), Uruguay se filma. Prácticas documentales (1920-1990). Montevideo: Irrupciones Grupo Editor, 2018, pp. 171-194.  

Lacruz, Cecilia, “Uruguay: La Comezón por el intercambio”, en Mariano Mestman (coord.), Las rupturas del 68 en el cine de América Latina. Buenos Aires, Akal, 2016, pp. 311-351. 

Markarian, Vania, El 68 uruguayo. El movimiento estudiantil entre molotovs y música beat. Buenos Aires: Universidad Nacional de Quilmes, 2012.Tal, Tzvi, “Cine y Revolución en la Suiza de América – La Cinemateca del Tercer Mundo en Montevideo”, Araucaria, año 4, n. 9, 2003.