Apenas veinte días después de promulgada la Ley de Instrucción Militar Obligatoria de 1940, se registraron las imágenes del “Grandioso desfile militar en homenaje al 25 de agosto”, film de 12 minutos, probablemente producido por la empresa Glucksmann y, de acuerdo a su procedencia, posiblemente realizado a pedido del Ministerio de Defensa Nacional. El ministro desde febrero de ese año era el general Julio A. Roletti, luego que renunciara el también general Alfredo R. Campos al rechazar el proyecto de ley del Servicio Militar Obligatorio en enero de ese año.
“Grandioso desfile … “ se hizo a partir del registro del desfile militar por la avenida 18 de Julio en la tarde del 25 de agosto de 1940. No tiene sonido ambiente; el audio es una voz over intercalada con marchas militares, que buscan completar un relato de “sentimientos patrióticos”.
El Bien Público, diario católico de la época, dedicó casi una página al desfile, así como a editorializar sobre los “voluntarios” que, por primera vez, desfilaban unidos a los cuerpos militares regulares. Evocaban su importancia, dando detalle de personalidades de la época que se unieron a esos cuerpos. Esos meses, tras la caída de París en manos del Ejército Alemán, “tal vez, marque(n) el momento de mayor fervor militarista de los uruguayos que sin diferencias de sexo concurrían a los polígonos de tiro para aprender los recursos mínimos de tiro … Las mujeres también quisieron al igual que los hombres aprender prácticas defensivas, pero fueron enviadas a formar parte de los cuerpos de enfermeras”. Allí aparecen las únicas mujeres del desfile, en los cuerpos militares sanitarios.
El semanario Marcha, también se ocupó del acto pero en su sección “Los 7 días”, a cargo de Julio Castro. En este caso, se satirizó el desfile a través de reflexiones de los personajes habituales de la sección, s. Siendo Grumpy uno de los más ácidos “ … El desfile fue, como desfile militar, malo. Ni las muchachas de la sanidad me gustaron. … Los infantes parecían soldaditos de plomo … Los cañones eran tan viejos que parecían sacados del Museo de la Fortaleza.”
El año pasado el Laboratorio de Preservación Audiovisual del AGU digitalizó, a pedido del Ministerio de Defensa, el “Grandioso desfile …”, de una única copia conocida que se conserva en relativo buen estado. Tal vez el sonido, en este caso registrado con la técnica de densidad variable, sea lo más deteriorado pero igualmente se pudo obtener un audio aceptable.
Es un registro significativo para la época por su duración, por la cantidad de cámaras que estaban registrando el evento y porque probablemente haya habido un equipo de producción numeroso y calificado trabajando para registrar el evento y hacer el film.
Ochenta años después, además del desfile y las miles de personas que llenaban 18 de Julio pintada de blanco, podemos ver detalles de las hermosas fachadas desde la actual Plaza del Entrevero hasta la Plaza Independencia.
Esas múltiples dimensiones de la modernización, que entremezclan la expansión del paisaje urbano, las contingencias de un escenario internacional apremiante y la presencia militar en el espacio público, fueron objeto de controversia. Revisitar esta película puede contribuir a la reflexión sobre estos asuntos en el presente.
Jaime Vázquez
El Bien Público, 26 de agosto de 1940
Ruiz, Esther, en Historia del Uruguay en el siglo XX (1890-2005), p. 105
Marcha, 30 de agosto de 1940